ZAPATISMO

es un término empleado poR HISTORIADORES para referirse al movimiento armado identificado con las ideas de EMILIANO ZAPATA, caudillo de la REVOLUCIÓN MEXICANA, plasmadas principalmente en el PLAN DE AYALA de 1911. Los integrantes del EJERCITO LIBERTADOR DEL SUR encabezado por Zapata eran conocidos como zapatistas.
Una de las frases más simbólicas del zapatismo era que la tierra es de quien la trabaja, reflejo de una suerte de PRIVATISMO, acuñada originalmente por el propio Zapata mientras trataba de eliminar el caciquismo en México y restituir la posesión de la tierra a las clases campesinas del sur del país. La frase y lo que representa se convirtió en el símbolo del AGRARISMO mexicano. El zapatismo, agrarista y armado, tuvo concordancias en su proyecto con el MAGONISMO, teórico y obrero.

También se encuentran personas y colectivos que vienen desde las luchas de los años setentas, que han sostenido diferentes formas organizativas, pero en los mismos espacios, este es el caso de las mujeres, campesinos y jóvenes que protagonizaron luchas y resistencias por democracia, defensa de la tierra, respeto a los derechos humanos, por vivienda y libertades políticas, tanto en las zonas urbanas como en el ámbito rural. En los corredores industriales del Salto, Ocotlan, Poncitlán, La Barca, que albergan la mayor cantidad de fábricas y empresas trasnacionales en la región, donde se han protagonizado luchas obreras por salario, defensa de contratos colectivos y democracia sindical, así como movimientos populares por vivienda y en defensa del medio ambiente.


La iniciativa del zapatismo se da en un contexto en el que prácticamente se impone una nueva guerra de conquista, que tiene por objetivo despojar de su territorio y su autonomía a los pueblos indígenas, convertir a los trabajadores en peones acasillados al servicio de las empresas trasnacionales y mantener en la miseria y el abandono a los niños y los ancianos, para lo cual se convierte a los militares en policías, a las leyes en meros cascarones que no garantizan los derechos a la salud, la alimentación, la educación, el empleo, ya no digamos los derechos a la recreación, la información; a una vida digna pues.